Superando barreras socioeconómicas a través de la tecnología y la mentalidad de crecimiento

Un reciente informe sobre los resultados de la prueba PISA 2022 en Argentina ha revelado una realidad preocupante: el 32% de los estudiantes de 15 años pertenecientes al estrato socioeconómico más alto no alcanzan el nivel básico en comprensión lectora.  Esto ha encendido las alarmas sobre la crisis educativa que trasciende los límites de la economía y cultura. La comparativa con otros países latinoamericanos agrava el panorama, mostrando que los estudiantes argentinos, incluso en el cuartil más favorecido, están obteniendo resultados inferiores. En contraposición, países como Chile, Uruguay, Colombia, México y Perú presentan porcentajes más bajos de estudiantes con aprendizajes por debajo del nivel esperado, sugiriendo que el problema en Argentina es de carácter sistémico y no se limita a cuestiones de recursos o acceso. 

Un aspecto crítico de esta problemática es la necesidad de desarrollar habilidades de concentración y finalización de tareas entre los estudiantes. La investigación sugiere que una parte significativa del desafío radica en la mentalidad con la que los jóvenes abordan su aprendizaje. Muchos estudiantes parecen creer que su inteligencia es un atributo fijo, lo que limita su motivación para enfrentar y superar desafíos educativos.

La promoción de una “mentalidad de crecimiento”, que implica entender que la inteligencia y las capacidades pueden expandirse a través del esfuerzo y la persistencia, emerge como una estrategia fundamental. Este enfoque no solo puede mejorar la manera en que los estudiantes se enfrentan a sus estudios, sino también cómo perciben sus propias capacidades de superación. Se convierte, por lo tanto, en un pilar esencial para el desarrollo educativo.

Para una startup enfocada en la educación como Toldy Ed, este panorama ofrece un desafío único. Al integrar en nuestra aplicación funciones que fomenten la mentalidad de crecimiento —como metas personalizadas, feedback constructivo y reconocimiento del esfuerzo y progreso— se puede contribuir significativamente a la solución de esta crisis. La capacidad de ajustar el contenido a las necesidades individuales y ofrecer evaluaciones de comprensión lectora puede actuar como un estímulo adicional para los estudiantes, alentándolos a ver la lectura no solo como una tarea, sino como una oportunidad para el crecimiento personal y académico.

La crisis educativa en Argentina es un llamado a la acción para todos los actores involucrados en el sector. La tecnología educativa, con su capacidad de personalizar y adaptarse a las necesidades de aprendizaje individuales, juega un rol crucial en este esfuerzo colectivo por transformar la manera en que se aborda la enseñanza y el aprendizaje en el país.

Articulo de referencia - "No se salva nadie" por Alfredo Dillon